DOLOR DESPUES DE LA CIRUGIA DE COLUMNA
De los pacientes que se operan, entre el 10 y el 50 % sufren el denominado síndrome de cirugía fallida de columna. En estos pacientes el dolor persiste tras la intervención o no se resuelve del todo, e incluso en algunos casos poco frecuentes, se agrava.
Las causas de estos “fracasos” en la cirugía son:
- Incorrecta selección de pacientes (sin cumplir los criterios para la cirugía espinal lumbar por patología degenerativa)
- Procedimiento quirúrgico incorrecto (por exceso o por su defecto, por error del espacio operado o por la persistencia del material discal comprimiendo la raíz)
- Asociación con otras lesiones degenerativas
- Fibrosis postquirúrgica: La cicatriz fibrosa epidural se produce como consecuencia de la cirugía, debido a la disección quirúrgica y a la organización de coágulos residuales, y sucede en todos los pacientes, en mayor o menor grado, y afectando a algunos más que a otros.
- Recidiva herniaria (recurrencia de una hernia discal es de entre 5 y 10 %, más comúnmente en el primer año después de la cirugía).
- Complicaciones (infecciones, lesión de una raíz nerviosa, fístula de LCR o un pseudomeningocele)
- Inestabilidad del espacio intervertebral superior al intervenido (consiste en el aumento global del desplazamiento de las vértebras en los movimientos de la columna vertebral tanto por atrofia muscular como por alteraciones de la estática de la columna por las fijaciones instrumentadas de los espacios intervertebrales inferiores).
Lamentablemente la tasa de éxito en una segunda intervención quirúrgica se reduce al 30 % y al 15 % en una tercera.
El tratamiento conservador con la Terapia MedX puede ser eficaz tanto como alternativa a la cirugía en un 85% de los casos, como el tratamiento del dolor postquirúrgico, siempre y cuando se instaura bajo una indicación y supervisión del personal médico especializado.