HERNIA DISCAL/PROTUSIÓN DISCAL
Los huesos (vértebras) de la columna protegen los nervios que salen del cerebro y bajan por la espalda para formar la médula espinal. Las raíces nerviosas son nervios largos que se desprenden de la médula espinal y salen de la columna por entre cada vértebra.
Las vértebras de la columna están separadas por discos. Estos discos amortiguan la columna vertebral y dejan espacio entre las vértebras. Los discos permiten el movimiento entre las vértebras, lo cual permite a uno agacharse y estirarse.
Con una hernia discal:
- El disco se puede salir de su lugar (herniarse) o romperse a causa de una lesión o distensión. Cuando esto sucede, puede haber presión sobre los nervios raquídeos. Esto puede llevar a que se presente dolor, entumecimiento o debilidad.
- La parte baja (región lumbar) de la columna es el área más comúnmente afectada por una hernia de disco (lumbago/lumbociática). Los discos del cuello (cervicales) están en la segunda área más comúnmente afectada. Los discos de la espalda alta y media (torácicos) rara vez están comprometidos.
- Una hernia discal es una causa de radiculopatía .
Las hernias discales ocurren con mayor frecuencia en los hombres de mediana edad y de edad avanzada, generalmente después de una actividad extenuante. Otros factores de riesgo pueden incluir:
- Levantar objetos pesados
- Tener sobrepeso
- Doblar o torcer repetitivamente la espalda baja
- Sentarse o quedarse parado en la misma posición por muchas horas
- Tener un estilo de vida sedentario
- Tabaquismo
TRATAMIENTO
En un 85% de los casos ejercicio especifico con la Terapia MedX el dolor disminuye y/o remite con resultado estable a largo plazo, siempre que se haya indicado en la fase adecuada de la enfermedad y por personal médico especializado en este método.